Santo Domingo.- Cerca de 19 niños haitianos, de los 45 ingresados en el hospital Darío Contreras víctimas del terremoto en Haití, comenzaron a ser trasladados ayer a alberques infantiles bajo la custodia del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y de la Iglesia Católica.
Algunos adultos también están siendo acogidos en esos de albergue ubicados en la capital.
Esto representa un respiro al centro asistencial especializado en trauma, donde se han ingresado 162 pacientes víctimas de la tragedia, mientras otros continúan llegando referidos de hospitales fronterizos en condiciones muy delicadas.
La asistencia a pacientes haitianos continúa generalizándose en distintos hospitales, tanto de Salud Pública como del Instituto Dominicano de Seguros Sociales (IDSS), así como en centros asistenciales privados, ubicados en la capital y el interior del país.
En el Darío Contreras se habían ingresado hasta ayer 162 pacientes; en el hospital Salvador B. Gautier y Jaime Sánchez de Barahona, pertenecientes al IDSS, se han ingresado 126 pacientes; en el hospital General y Cedimat, ubicados en la Plaza de la Salud, ayer había internos 20 y 22; hay cuatro en el Centro de Especialidades Abel González; en el Infantil Robert Reid Cabral dos y en la maternidad San Lorenzo de los Mina, una.
La Secretaría de Salud Pública informó que conjuntamente con otras instituciones no gubernamentales se inició el traslado de pacientes dados de alta a albergues especiales habilitados hasta tanto puedan regresar a Haití.
Los albergues que están acogiendo los infantes son el Hogar Vida y Esperanza ubicados en el kilómetro diez y medio de la carretera Sánchez y en la Calle España Número 53, del sector Santa Bárbara.
Ambos centros están bajo la coordinación y supervisión del Padre Jesuita Manuel Ruiz y otras organizaciones no gubernamentales.
Tratamiento preventivo
En otro orden, Salud Pública informó que está llevando a cabo un plan masivo de aplicación de tratamiento preventivo y presuntivo contra la malaria a toda persona que entra al país procedente de Haití, para evitar brotes de esta enfermedad.
Precisó que se ha incrementado también la vigilancia de febriles y diagnóstico oportuno de casos sospechosos de tuberculosis y VHI-SIDA.
Asimismo, el IDSS informó que sus hospitales ubicados en la capital y zona fronteriza continúan dando asistencia a pacientes víctimas de la tragedia.
Dijo que hasta el pasado domingo solamente en el Jaime Sánchez, de Barahona, se habían atendido 123 pacientes.
El director de la institución, Sabino Báez, hizo un recorrido de supervisión por el centro de salud para verificar la atención a los afectados.
A su vez, el coordinador de la Comisión Ejecutiva para la Reforma del Sector Salud (CERSS) Humberto Salazar, consideró que la comunidad internacional debe establecer con carácter de urgencia hospitales móviles en Haití, debido al riesgo de infección y muerte de miles de haitianos que no han sido atendidos por sus traumas.
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